En Talisker, la cebada procede de las llanuras de Inverness, que se tuesta con una pequeña cantidad de turba; la destilación se realiza en tres pequeños alambiques, dos para los low wines y uno de spirits, y el aguardiente que fluye tiene una vibrante personalidad especiada, de pimienta negra; y la crianza la realizan en sus 6.000 barricas de roble americano la mayoría ex bourbon.